Los 5 peores enemigos de un surfista
Bueno, está claro que desde que el año pasado las imágenes de Mick Fanning siendo atacado por un tiburón dieron la vuelta al mundo, muchas personas (sobre todo madres y padres) se han echado las manos a la cabeza y han pensado que el surf es demasiado peligroso como para practicarlo.
En primer lugar, nos gustaría decir que el surf no es solo práctica, y que la teoría puede hacer que sepas desenvolverte mejor en situaciones poco convencionales. Por otra parte, la vida merece la pena a pesar de todos los peligros que nos rodean. Si tuviésemos que hacer una lista jamás acabaríamos así que, ¿por qué no va a merecer la pena hacer surf? Eso sí, la cautela siempre por bandera.
Total, que para ser totalmente honestos con vosotros, hemos decidido hacer una pequeña lista sobre los 5 mayores enemigos del surfista y, cuando acabéis de leer el post, podréis juzgar vosotros mismos:
Tiburones u otros animales marinos. Sí, ¿quién no les teme? Ni siquiera los bañistas están a salvo de un ataque. Obviamente depende muchísimo de la playa en la que estemos surfeando y, como ya os detallamos cuando Fanning sobrevivió, hay maneras de actuar que pueden ayudar mucho a la hora de salir airoso de la situación.
Corrientes. Es un básico en las clases teóricas de surfing, conocer bien la corriente de la playa que surfeamos es vital para que ésta juegue en nuestro favor. De lo contrario, perdemos mucho más tiempo y energía en la remontada e, incluso, podría costarnos demasiado volver a la orilla o arrastrarnos mar a dentro.
Los fondos marinos. Sin duda es necesario informarse del tipo de fondo antes de surfear. No solo son muy peligrosos los de coral o lava, si no también los fondos de arena cuando hablamos de olas de gran tamaño. Según nuestro nivel tendremos que decidir si merece la pena o no meterse al agua. En los fondos de coral lo más recomendable sería ir con casco para proteger el cráneo, aunque los surfistas más experimentados prescinden de él.
Surfistas. Contradictorio, ¿eh? La ley de la playa a veces puede ser dura y, aunque antaño la cosa era mucho más heavy metal, todavía no está de más conocer un poco las reglas de cortesía para no tener problemas en según que playas. No hay que olvidar que las pintadas de «only locals» no son tan antiguas. Las broncas entre surfistas pueden llegar a ser muy desagradables.
Pánico. Sin duda, el mayor enemigo al que un surfista se enfrentará jamás es a su propio pánico (debido a la inexperiencia o el miedo). Mantener la calma siempre es la mejor opción, aunque sea difícil. Ahorraréis energías, estaréis más lúcidos a la hora de pensar… Sin duda el control del pánico es el mayor reto de todos.
En FreeSurfers School no solo os enseñamos a surfear o os damos claves para mejorar vuestro sufrir, sino que también nos gusta haceros llegar toda nuestra experiencia teórica, y ayudaros con la gestión del estrés a la hora de enfrentar un problema.
Y vosotros, ¿quién creéis que se esconde bajo vuestra cama?