El surf y la filosofía
¿Qué tienen que ver el surf y la filosofía? ¿Puede un deporte extremo como el surfing esconder la clave para reflexionar sobre nuestra vida y nuestra existencia? Para nosotr@s, la respuesta es un sí rotundo, Free Surfers. Como ya os hemos dicho muchas veces, cuando empezamos a surfear, más que en un nuevo hobby, se convierta en un estilo de vida. Muchas veces marcará tus ideales, como el ecologismo y el cuidado del medio ambiente, o tus prioridades a la hora de elegir cómo quieres disfrutar tu tiempo. Pero lo más curioso de todo, es que también es un ritual en sí mismo, una forma de reflexionar, de mirar al mundo de una manera diferente.
El surf nos invita a contemplar la belleza de la naturaleza en estado puro, su fuerza, su espontaneidad. Nos ayuda a relativizar los problemas y nuestra presencia en el mundo. Es un recordatorio de que lo más sencillo y cotidiano puede convertirse en nuestra fuente de felicidad. Hay pocas cosas comparables a ese sentimiento de estar presente y haciendo lo que más te apasiona. Un baño siempre es un baño, ¡surfeemos 3 olas o 10!
Surfear es también una cura de humildad para esos momentos en los que todo se magnifica. Es una forma efectiva de deshacernos de nuestro ego. En el surf no solo cuenta lo que queremos hacer o hasta dónde estamos dispuestos a llegar. Para surfear, tenemos que sacar el máximo partido a las condiciones. Es la propia naturaleza la que nos marca el ritmo y, nosotr@s, intentaremos sacar lo mejor de esa situación.
Todas las olas que surfeamos a lo largo de nuestras vidas son como una lección; cada una nos despertará emociones diferentes, o activará recuerdos o sensaciones distintas. No hay dos olas iguales y nosotr@s, como surfers, estamos también en constante evolución. ¡Como la vida misma!
Como veis, el surf y la filosofía están estrechamente relacionados y, si os apetece, ¡podemos seguir esta reflexión en el agua!